UGT BMN ILLES BALEARS: APAGANDO FUEGO CON GASOLINA

martes, 21 de febrero de 2012

APAGANDO FUEGO CON GASOLINA

dimarts 21 de febrer de 2012

 

En una sociedad en que la cultura del pillaje se muestra como sello de identidad. Y que según la prensa internacional define la situación española como la “tormenta perfecta”, escándalos políticos, escándalos financieros y por ultimo escándalos monárquicos. Dejar todo el poder de esta reforma laboral en manos del sector empresarial, es como darle una lata de gasolina a un pirómano.


Se supone que en una cultura occidental, responsabilizada por el bien común, por encima de los intereses personales, causaría más confianza. Pero la poca credibilidad creada, y una reforma desproporcionada, crea un clima de inseguridad en la que esta reforma se ve cuestionada. No tanto por la reforma en si, si no, por los que pueden hacer uso de ella.

No hace mucho tiempo hemos podido constatar como nuestra cultura empresarial, a raíz de la burbuja económica, era el escaparate de grandes signos de riqueza, en el que la opulencia personal y los escándalos dominaban el escenario financiero y empresarial.

¿A estos señores se les va a atorgar el derecho a decidir el futuro laboral de los trabajadores? Ávidos de beneficios, no van a esperar mucho tiempo en poder sacrificar, gracias a esta ley, numerosos puestos de trabajo, no para hacer viable su negocio, sino para recuperar su patrimonio personal, que han visto tambalear en este tiempo de crisis.

No tardaremos en encontrarnos a empresarios sin escrúpulos, pisoteando los derechos que han ayudado ha equilibrar un sector laboral que ya se vió hace 30 años castigado por razones políticas y culturales.

La capacidad del empresario por modificar y rebajar, unilateralmente las condiciones de trabajo facilita y amplia las vías por las cuales pueden actuar. Modificación y reducción de salarios, movilidad funcional y movilidad geográfica y traslados, jornada de trabajo, eres arbitrarios, reducción económica por indemnización, y un largo etcétera.

Que los dioses, nos cojan confesados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario